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jueves, 26 de mayo de 2016

30ª Jornada/IX año: Miércoles, 25 de mayo de 2016

Gran Cafetería Santander


Un plan renove, !por favor! ¡Por favor, un plan renove! Gruñen las paredes que sostienen los sietes imponentes ventanales de la Gran Cafetería Santander. -¡Sois de piedra!, está en vuestra naturaleza, es para toda la vida. ¡Nos sobreviviréis! Comienzan a vibrar para librarse de las figuras, forjadas en hierro negro, de animales orondos y cazadores estilizados que llevan clavadas a su gran pesar. -No protestéis, los clientes extranjeros vienen aquí porque nacisteis en los sesenta y nunca el equipamiento ha sido reformado. -Estamos viejos y gastados-, grita el amplio mostrador sofocando los lamentos de los taburetes fijos. -Llevad la etiqueta vintage con más nobleza y pundonor, como os oiga el propietario os manda a todos al vertedero-, les amenazó. Callan.

Llega Rocio, disimulo mi agitación y le preguntó el por qué estamos solo nosotras dos. Pasea los ojos por el local riendo y con un movimiento labial burlón mira el reloj y me dice: -Todavía es pronto, son las cinco y cuarenta y cinco. Empezamos a las seis. Está tranquila, no oye lo que se ha convertido en un clamor de taburetes, vitrinas, luces de neón. Huyó.

Comienza la tertulia puntual con el ya clásico silencio en respuesta a la pregunta de quién se ofrece voluntario para hacer la bitácora. Leticia pone sobre la mesa una buena sugerencia: -Se puede escribir un ensayo sobre como esquivar la bitácora.  Las vetas del mármol de las paredes se miran amenazantes, me ofrezco a escribirla después de haberles escuchado : -Merecerás  ser una Rascamán cuando alcances el número mínimo de bitácoras que han escrito los tertulianos habituales.

Pongo en marcha el IPad para grabar las intervenciones y escucho la voz soñadora  de Javier que responde a la pregunta de Leticia de qué pasaría si ponemos todos el dedo en la pantalla: -Estaría bien que saliera el Quijote. 

Asistimos a esta tertulia por orden de llegada e intervención: Marisol Elizari, Rocío Diaz Gómez, José León Cano, Leticia Cabeza, Juan Manuel Criado, Pedro Catalán, Juan Antonio Arroyo, Isabel Morion, Javier Díaz Gil, Ignacio Tamés, Francisco Fenoy, David Lerma, Ana Nieto, María Jesús  Briones, 

La tertulia comienza cuando Javier tras unos intercambios breves y relajados intuye que estamos listos para la escucha activa y la elucubración relajada y divertida y que su yo psicoanalista se hace consciente para guiar a poetas y narradores. Saca de su cartera un ejemplar del Cuaderno de Bitácora, la Antología de la tertulia de Rascaman, y dice: -¡Por fin! Aqui la tenemos" ¿Habéis hablado con José María para conseguir los libros? Las 4 paredes de mármol del reservado aplauden con entusiasmo, se les escapa: ¡Bravo, Javier!  ¡Bien, Javiboss! Están contentas  y ruidosas. Una me cuenta  el titánico esfuerzo de coordinación que ha supuesto el proyecto; otra de lo pesados que han sido los tertulianos, han dedicado a este tema decenas de horas. Les  agradezco el relato porque soy novicia, no he vivido la gestación del libro y mientras, los tertulianos sin darse importancia, están hablando de la distribución.

Tú empiezas Marisol,  dice Javier, y como un resorte me adentro en la habitación de Ana, mi personaje del cuento: el Don de la Simetría. Me asomo a su interior, se encuentra fatal. Ni ella ni yo sabemos si anida frustración, estrés, cansancio o simplemente necesita un calmante porque ya es adicta. Su marido y su hija tratan, ¡pobrecillos!, de pasar inadvertidos para no recibir su ira. Estoy en la tercera página y mis oyentes empiezan a percatarse del lío que he montado con los nombres de los personajes y de la arbitraria puntuación del cuento. Es el resultado de escribir a los dictados del alter ego y de un tirón como las adolescentes. Mis tertulianos me alientan y con paciencia escuchan mi defensa del texto con pretensiones de relato. Las paredes permanecen mudas, indiferentes. Noto crecer un deseo intenso de corregir, reescribir, sumergirme de nuevo en la vida de Ana. 

León me trae de nuevo cuando le oigo decir: - Mucha tecnología y mucha informática pero hoy esta tertulia parece una reunión franquista de los años cuarenta. A la derecha de Dios padre, los banquillos de las mujeres y los de la izquierda para los hombres. -La colocación ha sido aleatoria,  dice Rocio. Javier completa,  en la iglesia hay dos púlpitos en un lado los evangelios y en el otro las epístolas. Mientras en mi cabeza suena la voz de Mike Kennedy y su canción de 1967: 'Las chicas con los chicos quieren estar'. Por cierto, salió al mercado el mismo año que la Cafetería .

Le segunda lectura es de Rocio que se resiste a leer sólo unas páginas de su relato 'Consejos en el muro de Berlín'. -Es el más largo que he escrito y tiene poco sentido leer solo unas páginas-, dice. Se suscita un rico intercambio sobre dónde tiene que quedarse un relato para no convertirse en una novela corta. Prevalece esa exigencia de disciplina que Javier, con guante de seda. mantiene , "Si te llegas a la tertulia, lees". Uno de los pilares de estos diez años de tertulia. Se escuchan argumentos animándola a convertir el relato en una novela y un grito de síes de las paredes. La percepción que la trabajadora española hace de Berlin y de su clima, uno de los grandes personajes del relato, llama a una novela, le anima León.

En su turno, Juan Manuel nos lee dos poemas: 
  • En el Barro 
  • El vino. 

Hay  gran consenso en alabar el segundo poema e Isabel Morión nos lleva a Omar Khayyam matemático, astrónomo y poeta persa del siglo XV que escribió cuartetas que hablaban del vino, las mujeres y la vida. Isa promete leernos al persa en el futuro

Pedro Catalán nos lee: Teoría y Práctica del Monólogo. Un actor que explica a los espectadores lo que es un monólogo.  Un arrebato de inspiración. León lo alaba, está muy bien -dice- es una mezcla entre Wenceslao Fernández Flórez y Jardiel Poncela. 

A continuación nos lee Parodia del Romance de Rosa Frita del Marqués de Santillana, recogida en Las mil peores poesías de la lengua de Castilla,  por Jorge Llopis en 1973

Mientras, la Antología va de mano en mano, pillando caricias, ilusión, entusiasmo...

Leticia nos lee unos apuntes sobre una obra de teatro, o quizás una performance que está escribiendo sobre la rutina en una oficina. Las imágenes que describe son sugestivas, de una gran potencia y la imaginación de los tertulianos se enciende para placer de las paredes que piropean a la narradora. A mí me distraen y les pido que se retengan, ningún tertuliano parece oírlas y yo no estoy para que me distraigan.

Las palabras de León no han podido romper la tendencia y cada tertuliano que llega se alinea con los de su mismo sexo, León con voz recia y caudalosa insiste en llevarnos al pasado y mi mente se espolea. Escucho las palabras de Nabokov, "la literatura está en los detalles". Presto atención a los tonos, la voz, las palabras, las pausas. ¡Qué deleite!

José León tiene la impresión que esta primavera de 2016 tiene complejo de Electra. Está tan enamorada del invierno que le hace el boca a boca para no dejarle morir. "A mí me produce una tristeza y me ha inspirado un  soneto sobre la muerte":

Diluirse en la luz de ver la sombra

Despertaré del sueño que respira
en el amanecer que llora y canta
cuando ya con el alma en la garganta
traspase el vano espejo que me mira
...

Juan Antonio Arroyo nos lee un poema, con referencias del pasado. Su título

Altamira

Yo tengo esa gran suerte de conocer tu embrujo 
pinturas de la cuevas
que sois eternidades
...

Isabel Morión le parece tan bonito que lo vuelve a leer con gran emoción.

Isabel Morión nos anuncia que ya tiene su nuevo poemario en imprenta, está con las galeradas, le gusta la portada, el prólogo de Javier.  

Lee de la Antología de Rascamán:

Mirada a través de Blas de Otero

Revisando libros olvidados
un día despacioso de domingo
me tropiezo con hondos y tristes
versos amarillos. Se despierta
mi alma perezosa, queriendo crear...
...

Y a continuación, un poema de amor del poemario que está en edición.

Esas manos

Esas manos son como mariposas, 
que se posan sutiles
y acarician gozosas
todos los rincones
Esas manos son incomparables
...

Es el turno de Javier y nos lee del libro Cuaderno de Bitácora

PROBABLEMENTE LA  vida es más lenta,
y nuestro empeño en ir 
más lejos, más deprisa, 
más alto,
es tan solo un error...
...

Ignacio nos leyó el fallo del Premio del Profesor González Tocinillos que convoca anualmente el Departamento de Filosofía Agropecuaria, -dotado con un desayuno en la cafetería de la facultad-, en la modalidad de poesía y que se falló ayer tarde, resultando ganador: Vida conyugal.

En el turno de Paco Fenoy, recibimos dos poemas de su nuevo libro, que está dividido en cinco partes que terminan con un soneto. Estos pertenecen a la segunda:

En el tranquilo valle 
gozan de verde playa
del color de los días
...

El Segundo comienza así: 

Aire de  fuego trae
blanca, olorosa, viva llama
que poco a poco 
va sintiendo
...

Finaliza la tertulia con María Jesús Briones con dos relatos breves, muy interesantes. La idea se desbroza en dos pasos, el primero inventa palabras y el segundo describe su significado y nos proporciona sus sinónimos 

Termina la tertulia como es habitual a las veintiuna horas, levantó la vista de mis contertulios y sonrío a las paredes pero no tengo eco, frías, erguidas, indiferentes no hay brillo en sus vetas y ondulaciones. 


Marisol Elizari
21 de diciembre de 2016

martes, 24 de mayo de 2016

29ª Jornada/IX año: Miércoles, 18 de mayo de 2016



...se solucionó acudiendo a la agencia 
de Mortadelo y Filemón

Parte de la tripulación está en cubierta sin parar de parlotear sobre drones y cables, como si estuviese tomando unas copas y aperitivos en una celebración de recién desposados, al tiempo que el ilustre y vetusto poeta Aureliano Cañadas, reparte algunos ejemplares de su último poemario “La Isla de la Nada” en el cual se describe, entre magníficos versos, el último viaje del hombre en las turbulentas aguas de la vida, del que entresaco el poema titulado “Subastas”:

Nunca participé en reñidas subastas
con dioses y demonios
con el fin de ofrecer a los mortales
paraísos, edenes,
inacabables vidas venturosas.
Nunca les envié
angelicales drones que anunciasen
mi llegada: son ellos
quienes llegan a mí
inexorablemente.
En mis brazos no añoran otros brazos.

A continuación, Aureliano tras pinchar con su daga un trozo de jamón e introducirlo en el refugio adecuado, tras un proceso de trituración diseñado a través de milenios de evolución, nos leyó un poema del que entresacamos los versos:

“Los últimos inviernos abría la ventana
¡Cómo se hacía esperar! Aprendía a descubrirla
por yemas abultadas, por los brotes ocultos
o el piar todavía desvalido de un pájaro
…”

Extraordinario Aureliano, como lo es el poema titulado “En que todo está medido”,
que termina con los versos:

“le fue dado saber
que alguien había medido,
inexorablemente,
su vida.”

Fenoy a su vez, extendiendo sobre la tapa de un barril unos legajos, nos mostró un magnífico poema de Fernández Retamar, en el que se rememora a Federico García Lorca, y que nuestro capitán, Javier, leyó magistralmente, con esa emoción que sabe dar a las palabra. A continuación Fenoy, nos leyó un poema- soneto titulado “Silencio que no muere”

“Cuando tienta la nueva luz, cumplido
y feliz se concibe en su trazado
Que siembra con poemas que prefiere
de su afín soledad. De osadías
que extras de su silencio que no muere.”

Únicamente advertirte que algunos versos no son endecasílabos, Fenoy.  

Seguidamente, el poeta Pablo Llorente repartirá un pequeño poemario titulado “La poesía”, del que nos leerá el poema “Contigo alborea la vida”, dedicado a la palabra como fuente  capaz de transportar los sentimientos que embridan al hombre. Así nos dirá:

“Contigo alborea la vida
cuando a mi espíritu estimulas
Amiga, que tu amor me  lleve”

Para terminar, con el verso:

“Siempre mi luz; tú, la palabra”

Estupendo ramillete de poemas adornados con buenos dibujos, terminando con los versos:

“escribir un poema es arrojarse
al vacío del folio en blanco
es lanzarse al río de las palabras”

Para acto seguido, lanzarse con avidez sobre el vaso de cerveza burbujeante que Rocío había depositado a modo de reclamo y así calmar la sed cosechada por su estancia de varias horas al timón, sin una gota de líquido que llevarse a los labios; y así cumplir el castigo impuesto por el capitán, cuando se negó barrer la cubierta. ¡Rayos y truenos!: así aprenderá la lección semejante bellaco, grabada por la Orden del Císter, y que me permito transcribir a los tiempos modernos: “escribe y labora, y no te escaquees”.

Por su parte León, nos lee el artículo, que ha publicado en la revista literaria Clio, en la que hace un resumen de su última publicación “Tras las huellas de Al Andalus", destacando la nostalgia de un pueblo arrancado de las tierras de sus ancestros por la codicia y la rapiña. ¿Por qué razón a los sefarditas se les concede el derecho a la nacionalidad española, y , sin embargo, a los moriscos no?
Magnífico libro de investigación de un pueblo sin patria, narrado con una prosa bella y llena de referencias mágicas en la Serranía de Ronda y de Marruecos, y en el que se describe, entre otras cosas,  la añoranza de los moriscos de Tánger por las antiguas tierras de sus antepasados.

Y tras arribar nuestro velero en las costas valencianas, parte de la tripulación salió despedida a estirar las piernas junto a los playeros que se quedaban admirados de estas gentes del mar que paseaban orgullosos con sus atuendos de corsarios que para dar más tono a su indumentaria cimbreaban por doquier las espadas contra el viento ante la admiración de los presentes, provocando el manteo jubiloso del alcalde valenciano por parte de un grupo de turistas alemanes que de esta forma mostraban su satisfacción por forma tan original de recibir a las huestes alemanas seguidas por la atenta mirada de la ex regidora Rita Barberá que miraba con devota envidia la escena, ya que consideraba que ella sí que se merecía un buen manteo de los honorables turistas.

Ya bien entrada la tarde, la tripulación fue regresando a la nave y mientras recordaban las diversas aventuras vividas por esos mundos de Dios, poblado por bañistas, irrumpió como un ciclón nuestro muy querido y arrojado corsario Ignacio Tamés García que manifestaba una extraña agitación como si estuviese poseído por un calambre, lo cual provocó la consiguiente preocupación en la tripulación,ya que por más que Rocío buscara en todos los pergaminos que tratan sobre todo género de posesiones, no encontraba ninguna que se manifestara de la forma tan extraña como la que zarandeaba a nuestro nunca suficientemente alabado Tamés, por lo que nos vimos abocados a llamar al arzobispo Cañizares, experto en este tipo de exorcismos. Pero nones, que nuestro compañero seguía centrado en sus convulsiones. Menos mal que el referido, tras algunos aspavientos, nos aclaró la fuente de sus convulsiones:
-¡Puaf, es que me he paseado por algunas huertas, por ver si robaba alguna lechuga. Y como la primavera ha sido muy lluviosa he cogido una alergia de no te menees. ¡Aaaaaa… chisss!, con lo cual, el atribulado Cañizares se fue con la maleta a otra parte, no sin proferir diferentes anatemas contra la tripulación.

Tras varios estornudos, Tamés nos leyó la última aventura-declaración del Profesor González Tocinillos, en la que con un gran sentido del humor narra partes del discurso de Navidad del ciudadano Borbón y Grecia, del que entresacamos esta joya:

“Los españoles nunca nos hemos rendido ante las dificultades, que han sido grandes, y siempre las hemos vencido”; pero el Profesor Tocinillos, en su primera comparecencia después de la jornada electoral de diciembre de 2015, contestaría: “ Los habitantes de la Iberia profunda no sólo se han rendido con frecuencia, sino que lo seguirán haciendo cuando la situación así lo requiera”. Genial.

A continuación, no sé si inspirado por las tareas bucodentales que le tenían absorto desde hace meses o por alguna otra razón misteriosa que le impulsa a la práctica del misticismo en el cuarto de aseo o por alguna otra razón que se escapa a mis entendederas ya sea  por la bajada de la Bolsa provocada por la huida de grandes fortunas a las islas de la piratería internacional o qué se yo, el caso es que  Carlos Tejado aprovechaba los ratos de ocio para abrillantar su bien provisto armamento dental, por lo que no es de extrañar que nos leyera el pequeño relato titulado “Cepillo de dientes S. L.” en el que se narra una historia de amor enternecedora: “música derramada por nuestros cuerpos” nos dirá; o más bien una noche de amor para de madrugada quedarse el protagonista solo, dejando el amante para el recuerdo los cepillos de dientes de ambos mirándose frente a frente, como único rescoldo del amor. Es curioso, con qué maestría Carlos da vida a los dos cepillos.
Al final, el protagonista arrojará a la calle el cepillo de su amante, quedando el suyo tan sólo como él.
Magnífico.

Rocío por su parte, tras ajustarse el pañuelo de corsaria victoriosa en más de cien batallas y consciente de las perdidas por valerosos corsarios en las profundas aguas de la injusticia, nos leyó el cuento titulado “Conejos en el muro de Berlín”.
Es la historia de una emigrante española en Berlín... Y cuando más embelesados estábamos, esperando que se desvelara el misterio que se ocultaba bajo el velo de los conejos, Rocío cortó en seco la lectura pues al parecer, según ella, el que esto escribe estaba distraído mirándola con el catalejo con la complicidad de toda la tripulación, incluido el capitán; “patente  y vulgar prueba de machismo”, espetó; y eso sí que no lo toleraba ella.

En fin, que el próximo día nos leería la continuación si demostrábamos el arrepentimiento colectivo apropiado tras haber cumplido la penitencia correspondiente: barrer tres veces la cubierta con un cepillo de raíces, de los que se usaban en el siglo veinte.

¡Qué deciros mis queridos amigos del distraído Federico!, que brincaba de dolor tras darse un martillazo en el pulgar cuando intentaba ajustar uno de los anillos de hierro de uno de los barriles después de leernos el poema titulado “Zamora o el milagro del foso”, del que entresacamos los versos:

Y si la sequía tumbase la nostalgia
 y si hiciera caerse el foso
recuerda que yo te hablaba,
amor mío.

Estupendo, Federico.

A continuación Iñaki Ferreras nos leyó el relato “Viajo y no encajo” tras intentar envainar su sable. Tarea harto difícil por el grado de oxidación que había sufrido la funda pues su dueño  la había dejado despeñarse en las inclemencias del tiempo tras abandonarla a su suerte sujeta a los formidables ataques del agua salobre.

Pura dejadez imperdonable en un pirata que se precie de serlo: la dignidad del corsario por los suelos.
Relato en los que nos describe las vicisitudes de un periodista de 50 años; vida azarosa en la que se queja a su jefe del estrés a que está sometido por tanto ir y venir de acá para allá, cosa que provoca una ácida discusión entre ambos; pero nuestro protagonista se aviene a los requerimientos del jefe; mas a pesar de todo, nuestro periodista es sustituido por una pelandrusca, rebajando a nuestro amigo a la categoría de mero colaborador; mas escribe una novela que recibe el premio Planeta, con lo que triunfa en las Letras. Pasado el tiempo, se pasará por la redacción y, ante su sorpresa, observará que la han cambiado por un puticlub.

Los presentes le apuntan algunas acotaciones para que el relato consiga la uniformidad y fuerza necesaria; que enganche al lector, amén de cambiar el título del mismo.

Ana, por su parte, que se había identificado con Rocío en lo del machismo y demás, tras mirarnos de forma aviesa, y sin cesar en reproches sobre nuestra mentalidad trasnochada, en un acto de condescendencia nos leyó un poema escrito en gallego pero que tradujo al castellano que lleva por título “Ellos”, y que con su permiso pasamos a estas páginas:

Yo volví con sentido
para poner cara 
Zeus, a Heros o Afrodita.
También a Prometeo
Jugando con fuego.
Sólo quería estar allí,
entre ellos, mis hermanos divertidos
y lejos, lejos del tiempo y de la vida.
Estaba más viva
por sus historias virtuales
que por las mías
sin nadie ya que le hagan caso,
tontas.

Ya no valían.
La soledad de un  sólo día
era mi soledad.

Poema  muy bueno y sencillo. Ana, siempre es un motivo de gozo escuchar tus poemas, o tus pequeñas historias llenas de las alegrías o tragedias del mundo que nos rodea. Gracias por todo.

Alberto que  tenía que declarar como testigo ante el juez por diversos delitos relacionados con la corrupción en las Comunidades de Valenciana, Madrid, Cataluña y otras, había sido encerrado y amordazado en un zulo de la Sierra de Guadarrama, según dicen las malas lenguas, por orden de los dirigentes de las tramas  Gürtel, Púnica, A Trincar lo que Podamos y Que se Joda el que no Pueda; mas pudimos rescatarle, por mediación de uno de nuestros piratas que estaba de vacaciones por aquellos lares.
Pero Alberto, por más que le insistimos fue incapaz de decir ni pío. Era tal su estrés por rapto que parecía estar sometido a un colapso gravitacional cuyo centro estaba situado en el punto de simetría de su cuerpo, lo que le empequeñecía por momentos. No insistimos pues y le dejamos a su suerte, a merced de sus jadeos, esperando que el sueño le liberara de semejante presión.

El que esto escribe, por su parte, por si acaso los presentes no llegaban al verano, nunca se sabe, leyó el poema titulado “Agosto”, del que entresaco estos versos:

Sentado en esta pequeña silla sin apenas
historias registradas
en los grandes archivos del futuro
estoy sentado.
Y con los ojos plagados de caminos.
al percibir… su antigua historia de álamos
o simple campo frágil de trigo recordando el Atlántico.”

De repente, un enorme ruido de mesnadas, encabezadas por Rato, el Bigotes, los Pujoles y otros irrumpía en las arenas en dirección a nuestra embarcación cargados de banderas patrióticas en busca de Alberto y demás tropa harapienta, lo que nos provocó una confusión repentina que se solucionó acudiendo a la agencia de Mortadelo y Filemón, consiguiendo de esta forma, vestirnos  de honorables sinvergüenzas. cosa que nos permitió un perfecto camuflaje, unido a la conversión de nuestro navío en una embarcación vestida de crucero.

Todas estas maravillas y otros encantamientos difíciles de explicar, ocurrieron el 18 de mayo de 2016, y para que así coste:

firma el presente documento, con una pluma de ave, y con el pulgar impregnado de tinta:


 el nunca alabado corsario:

Juan Manuel Criado Manzano
24 de mayo de 2016






jueves, 19 de mayo de 2016

28ª Jornada/IX año: Miércoles, 11 de mayo de 2016


Excavación arqueológica


Igual que un arqueólogo he descubierto muchos tesoros egipcios, sumerios, griegos y romanos pero en mi búsqueda de verdades ígneas he podido hallar en un recóndito lugar de Literatura sorprendente y brillante, algo insólito.

Yo limpio reliquias y desempolvo los tesoros dignos de Tutankhamon. Entre mis hallazgos estaba Pablo Llorente con un poema “Por mi bien” con sus características expresiones: “Lechuzas vigías”, ”Bien, le invito por mi bien”, es irónico y guasón este poema y su poeta, con otro titulo: ”El pasar del tiempo”: ”El tiempo pasa silencioso”, ”Pido una sonrisa, un libro y la música de los astros”.

Encuentro a mi paso más tesoros, más joyas y esta fue con la que tropecé: Omega, ”Las trece rosas” homenaje a unas mujeres valientes, y el ensayo “Humanos”, díscola idea y de ignota forma.

Y voy de encuentro en encuentro e Isabel me muestra su sapiencia e interés por Enrique VIII y sus seis esposas, más un ensayo ”Ensayos de estética” de Mario Soria en que pone de ejemplo a Isabel y Amelia como poetas insignes y sus poemas.

Fenoy, otro tesoro extraño con poesías de retiros lejanos y como Fray Luis de León, entre sus versos “Dejado atrás su olvido”,”Abanico ventable”, ”Clamoreo en cuerpo vivo”.

Alberto con premios y sin relatos es una reliquia por descubrir.

En su centro, como un viajero envuelto en ambiente arábigo, estaba Javier con poemas de Begoña Montes, título “Hormigas”, con sus tres poemas:

“cuerpo de metal,
cuerpos que arrestan divididos,
solo te escuchan las hormigas”

“¿Que quisiste decir? 
Cuando no dijiste nada”

“La muerte sueña 
con el hombre perfecto”.

Y con el tesoro del Corán engendrado en plata, León nos trae los moriscos y “su poema misterioso” ”Pecho con la vela hinchada”,”Vigilando mi espalda y óxido y miel”.

Sigo con Aureliano, vuela con “La isla de la nada” un reclamo para mis ojos, y con sus tres poemas perdidos sobre temas circenses y otro sobre universos.

“Petruccio saltimbanqui”, ”Honor y gloria” y “No sé cuando” frases bailarinas a la par que saltarinas.
“Mañana durmamos en un establo”, ”Sin honor y gloria quienes caeremos por el suelo patrio caigamos por el fatal alambre”. Otro poema “Gravedad” ”En esa hora abriga más que un vaso de vino”.

Ignacio trae política destilada de sorna y habilidad demosteniana con su Fructuoso del Campo, “Seguridad”: “Como vivo poco tiempo por lo menos sabrían que no llegaría a cumplir mi mandato en su integridad y no tendría tiempo para corromperme. Además conmigo entierran a su presidente”, ”Insisto en que esta silla me la regalo un simpatizante”.

David nos muestra las pasas de Corintio con los relatos silenciados, Ana se marcha.

En bello adorno y con orfebrería artesanal José Maria me obsequia con sus poemas.

“Fascista, anti-fascista” con fina ironía.
“La masa es culpable”,”La mente decadente”,”Preferimos ser lobos a borregos”, "Noble impulso de juventud”. Con un poema místico, ”El lienzo de Job”, con versos de tonalidades lúgubres y audaces ”Los hombres son sueños de Dios”, ”En las conquista frágiles”, ”De un triángulo mudo sin ojos”, ”No voy hablarte como los dioses con sagrada imperfección”.

En Ana Nieto hallo una prosa poética con fondos muy empáticos a la par que filosóficos. ”Donde estoy para llegar a mí”, ”No aprendemos de los horrores”, ”Me pierdo en mis bosques”. Entre otro poema “No me cabe”: ”Negra por dentro, respiro como un Guernica”, ”Me siento a meditar”, ”Ayudar, ayudar de alguna manera”.

Y a me adentro más. Carlos me muestra un poema de Julieta Valero”Sofisticado que recuerda reducciones de la alta cocina”, ”La excedencia de recitales”, ”Somatizamos flores”.

Estuve con estos orfebres de imágenes y al estar entre joyas, reliquias antiquísimas, tesoros egipcios, estatuas romanas... dejaron impreso en su antología “Cuaderno de bitácora” de Rascaman, todas las mejores galas y ornato. Todo terminó y los papiros expiraron. Como Howard Carter he encontrado tesoros de incalculable valor y me marcho dejando en el museo de mi memoria poemas que quedaran cincelados en la historia o tal vez sólo una expresión humana y digna de ser escuchada.



Omega Escribano
19 de mayo de 2016