NO TIEMBLA EL MISTERIO
Mis queridos hermanos, al Padre
Cuaderno le habría correspondido encargarse de los oficios del miércoles pasado,
pero conmocionado como está por los asuntos Vaticanos, ha delegado en alguno de
los hermanos de la congregación. El Padre Bolígrafo, siempre ocupado, le ha
pedido al Hermano Ordenador, que se encargue de dejar constancia de dicha
asamblea y él, amablemente ha accedido.
En los bancos del Ruíz, en
armoniosa paz, se congregaron María Antonia, Isabel, Juan Antonio y Juan Manuel,
Cinta, León, Javier, Fernando, María, Irina, Leo, Jorge, Ana y Carmen.
Sin dejarnos llevar del miedo de
que Dios no nos coja confesados, a la buena de Dios, conversábamos
los feligreses, y en nuestro hablar pausado, como es menester en recintos
sagrados, hubo palabras para Aureliano, para la tertulia del Café de Oriente,
par Teodoro Rubio. Los colegios del Opus, las monjas buenas, malas y
malísimas -una especie abundante a juzgar por lo dicho-; Maruja Mallo y su
vanguardismo, la teobromina chocolatera y sus beneficios para los consumidores,
aunque sea de Pascuas a Ramos, hasta que Javier echó las
campanas al vuelo y nos recondujo a la senda del quehacer
vespertino.
Isabel con sus poemas “ MIRADA A
TRAVÉS DE BLAS DE OTERO” y “ CONSTATÉ MUCHAS MÁS HEBRAS BLANCAS” llenó el aire de música celestial, y constató que quizás es cierto que Dios me dé morena
con gracia y no rubia lacia.
Juan Manuel con su “DEVASTACIÓN”,
un poema de autómatas poblado de ratones y su “MALABARISMO”, ratonero también,
dejó claro que Algo
tiene el agua cuando la bendicen: en
el mundo los hay que mandan y los hay que obedecen.
Juan
Antonio y su “FUEGO ENVOLVENTE” trajeron ecos de un amor que sigue vivo y que
tiene
más
razón que un santo
en empeñarse en ser disfrutado.
“HERENCIA”,
el poema de María Antonia demuestra que quizás sea cierto que La
procesión va por dentro cuando descubrimos que todos somos el último
eslabón de la cadena.
Rocío
nos hace transitar por el mundo real de que “LA VIDA ES ESTE ABSURDO TRAJÍN DE
BOLSAS DE BASURA” un delicioso cuento filosófico, para unos optimista y
esperanzador, para otros lo contrario. Que no nos libra la paz ni la caridad
de ese trajín de bolsas a ninguno.
Cinta
cuenta, improvisa, recrea el nacimiento de un amor destinado a morir joven entre
una activista social y un policía:
Casamiento
y mortaja, del cielo bajan, Dios los cría y ellos se
juntan.
El
soneto del maestro León aromatiza la tarde con sus palabras, ”SCHEREZADE”, que
dedica a Isabel. Que si Dijo el Sabio Salomón que el buen vino alegra el
corazón, también lo alegra el buen hacer del nuestro
sonetista.
Javier
toma prestados los versos de Claudio Rodríguez “AJENO” y además, nos ofrece el
documento del que entresaca este humilde siervo las frases que adornan la
bitácora. Es de justicia hacer la referencia, Dar a Dios lo que es de Dios
y a César lo que es del César, y a Javier las
gracias.
“EL
ASCENSOR” de María Juristo nos sube y nos baja en el bloque de los instintos
humanos entre risas, Por los clavos de Cristo que me gustan las
historias que ella escribe.
Fernando,
pasa la palabra a Irina, y ella nos ofrece “20 DE FEBRERO DE 2013”, una carta
de amor condensado y sentido, de esos que trasciende el tiempo y un par de
poemas encendidos, frescos como su juventud. Como Más valen coces de monje
que halagos de escudero, acepta sugerencias
enriquecedoras.
Revuelo
de nombres de poetas, lecturas obligadas para todos, llenan el aire de versos
para que Leo tome también prestada las palabras de Blas de Otero, “DIGO
VIVIR”
Entre
santa y santo, pared de cal y canto.
Jorge
lee su “TROYA” un poema que navega por el tiempo con imágenes e ideas
sugerentes: maletines, caballos se esfuerzan en hacerlo, Dios nos libre de
las aguas mansas.
Y
Carmen, con su “TORMENTA”, y su estilo de siempre, nos trasporta a un navío que
surca las aguas de la literatura. A Dios gracias, no naufragamos
entre ellas.
Ruego
a los cielos que perdonen mis pecados, y os encomiendo Id con Dios y volved, al
próximo miércoles, para contento de todos.
23 de febrero de 2013
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