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domingo, 31 de mayo de 2009

31ª Jornada/II Año: Miércoles, 20 de mayo de 2009

Diccionario básico de términos empleados en la Tertulia del café Galdós


CAOS 1 m. Confusión y desorden que precedió a la ordenación del mundo. 2 Situación, asunto o cualquier cosa en que hay mucho desorden y confusión. 3 El producido en el Café Galdós por David, Javier, Celia, Vicente, Sagrario, Rocío, Aureliano, Ángeles, y también Liber, al inicio de la tertulia del miércoles 20 de mayo de 2009: a Javier le llaman a su teléfono móvil y desaparece, Líber toma nota de las consumiciones y vuelve transformada en camarero-marinero con tatuajes en los brazos, Celia intenta recitar en catalán un poema de Joan Magarit que, entre otras cosas, dice “Qué odiosa arquitectura / ha acabado por ser, sin remedio, la vida”, a un público que no la escucha y que la interrumpe continuamente. 4 Antónimo de orden y coherencia, los cuales consigue restablecer Aureliano tras elevarse por encima del resto para leer un poema suyo en el que habla de Satán: “¿Quién me atormenta a mí, el atormentador?”

SEXO 1 m. BIOL. Carácter de los seres orgánicos por el cual pueden ser machos o hembras. 2 Conjunto de prácticas encaminadas a obtener el placer sexual. 3 Objetivo nocturno que persiguen los hombres protagonistas del poema leído por Sagrario, titulado “Noches vampíricas”, que, de seguido, propicia que en la mesa del Café Galdós se abra un encendido debate en torno a la opción sexual de un poeta conocido por varios de los/as presentes (de cuyo nombre no puedo/quiero acordarme), algunos/as de los/as cuales se ha visto hostigado/a días atrás por tarjetas de identificación y teléfonos personales que el poeta en cuestión no dejaba de entregarle 4 Ocupación principal ejercida por las profesionales de un sector al que una de las tertulianas confiesa que soñó con pertenecer, bajo la denominación eufemística de “chica de carretera”, en clara confusión, según aclara más tarde, con aquellas mujeres que en las gasolineras de su pueblo gallego y de su infancia llenaban los depósitos de los coches normalmente conducidos por hombres.

SUEÑO (Caerse de, Conciliar, Descabezar, Echarse un) 1 m. Estado del que duerme. 2 Acción de imaginar sucesos y escenas mientras se duerme. 3 Cosa en cuya realización se piensa con mucha ilusión o deseo. 4 En palabras de Sagrario, “mares irreales”, definición extraída de uno de los poemas que ella lee a la concurrencia del Galdós, y cuyo verso definitivo proclama: “Los sueños son mares irreales”. 5 Cada una de las profesiones citadas por los tertulianos asistentes en respuesta a la pregunta formulada por uno de ellos, Vicente, con la que pretende conocer la verdadera vocación ocupacional de sus compañeros, y a resultas de la cual, alrededor de la mesa del Galdós resurgen, disfrazados de otras cosas, maestros espirituales, actrices, misioneras, profesores de educación especial, profesores de literatura, profesionales de las tertulias, estrellas del rock, guerrilleros y mujeres casadas y con hijos. 6 Meta alcanzada por el violinista callejero que todas las mañanas se cruzaba con Ángeles, a quien confesó ser feliz por el hecho de haber hecho realidad su sueño de vivir de la música.

MUERTE 1 f. Cesación de la vida. 2 Acción de acabarse, desaparecer o destruirse una cosa; particularmente, una sociedad o un afecto. 3 Defunción, fallecimiento, óbito, ocaso de una persona. 4 Destino que le esperaba al personaje principal del relato leído por Carmen Frontera, después de cruzarse en una carretera con un conductor kamikaze, momento a partir del cual la tapa de una cafetera encaja al fin y todo lo demás parece cobrar sentido, como en el juego de las muñecas rusas que se esconden una dentro de la otra. 5 Destino que también aguarda a los dos empleados de banca que, de acuerdo con el relato de Ángeles, cada mañana se regalaban la lectura mutua de sus esquelas ficticias y respectivas, y que, finalmente, como quien invoca al Diablo y lo consigue, en un golpe de humor negro, negrísimo, terminan por convertirse en sus verdaderos y únicos protagonistas. 6 Destino que deberían sufrir, en palabras de Vicente, los mayores de 80 años, edad que, por suerte, ninguno de sus contertulios supera, lo que les permite mirarse con complicidad y reciprocidad, y suspirar honda, relajadamente, para, a continuación, pasar a otra cosa, mariposa.

AMOR (Profesar, Sentir, Tener, Tributar) 1 m. Dícese de la predilección que siente una persona hacia otra, que se manifiesta en desear su compañía, alegrarse con lo que es bueno para ella y sufrir con lo que es malo. 2 Razón que mueve al abuelo protagonista del relato presentado por Rocío, para seguir escribiendo cartas de amor a su esposa, fallecida cinco años antes, cuyo destino no es otro que el cementerio en el que ella se encuentra enterrada, cumpliendo con la máxima machadiana del amor como lo que pervive más allá de la muerte. 3 Sentimiento experimentado hacia los libros, los personajes, las historias, las palabras, los versos con ritmo y sin rima, la reflexión y la buena compañía que poseen los tertulianos que cada miércoles por la tarde se reúnen en la salita del Café Galdós, en un periodo de tiempo comprendido entre las 18:00 y las 21:00 horas, poco antes de separarse y de que la noche se cierna definitivamente sobre la ciudad.


David Lerma Martínez
30 de mayo de 2009



1 comentario:

Anónimo dijo...

Me encanta esta bitácora, David.
Ana D.