Páginas

martes, 18 de febrero de 2014

21ª Jornada/VII año: Miércoles, 12 de febrero de 2014


LOS ALARIFES 
(la bóveda mágica de los libros)


Hoy nos reunimos en la nueva sede de los Rascamanes, “LA LIVRERÍA”.

¿Seremos los alarifes de este nuevo espacio? Seguro. Estamos protegidos por la bóveda mágica de los libros. Y nos disponemos a crear un nuevo ámbito, ese que se cohesiona con la palabra.

Paloma Hidalgo comienza poniendo la arena fina de su “MONSIEUR”. En el relato brilla el broche para mamá del protagonista, acabando con su historia de amor truncada con la escaparatista. En otro relato, con argamasa gruesa, aparecen el Calvo y la Gorda, la marionetas de un teatro ácido.

Cuento los peldaños de AMBERES,  donde Bolaños deslumbra al lector con su pértiga sobre el vacío entre la poesía y la realidad sórdida.

Javier comenta TODO LO QUE ERA SÓLIDO, y Muñoz Molina nos aturde con su ruido de piqueta. ¿Se derrumba España? El escritor revela que cada vez que sale de ella, lo hace con alivio, por la involución que encuentra aquí cada vez que regresa. (Paloma Hidalgo, que viaja frecuentemente a Nueva York, afirma que hay cambios equivalentes también entre los rascacielos).

Isabel Morión, en CITAS CON LAS GENTES DEL MUNDO proclama la importancia de ventanas abiertas, incluso en medio de tradiciones seculares, como la tamborada de Calanda, al encontrarse con gentes de todos los países. Buñuel y los melocotones construyen el marco de sus miradores. Y Benedetti nos recuerda en su poema el tiempo vivido y sus huellas.

Aureliano que nos trae siempre piedras griegas de sus viajes a Itaca, en el encuentro de Minotauro y Teseo, impregnado de oscuros deseos, diseña la habitación secreta de cortinas prohibidas.

Paco Fenoy, con su poema JOB construye una sinagoga, resuena la paciencia y la belleza de las piedras judías.

Y como nuestros edificios se iban, poco a poco, volviendo demasiado solemnes, Rocío lanza su TRES MURCIÉLAGOS DE QUINCE, colgados de las espalderas de su gimnasio ideal, toda una reflexión sobre el lenguaje, el contenido y el continente abracadante de tres héroes del sexo adolescente. Las risas han estado a punto de desmoronar la pirámide libresca que nos alberga.

Federico Monroy con su azulejos incas, nos traslada al lenguaje de Lima, con la fonética y la toponimia. El oro peruano de CARTAS PERUANAS nos deslumbra, una vez más.

La plomada de José León nos guía, desde CONTRA LA INFAMIA, hasta su OFRENDA FINAL, ese cofre vacío, en la estancia de los tesoros, una metáfora quizá, del comienzo de otro ciclo.

La celosía de María, siempre jugando con la luz y la sombra, exhibe la delicadeza de su HALLÉ.

La voz de Cortázar nos acompaña...

Alma y Ana nos hablan de la fluidez de las aguas, naturaleza incesante, eternidad que nos salva del recuerdo doloroso, y la locura de las olas. Cada una con los sortilegios que emanan de AGUA, fuente incesante, y ONDAS, nostalgia de espumas equivocadas.

Amelia en el TREN QUE IBA, PERO QUE NO VOLVÍA, se desliza por una estación con reflejos de los hechos cotidianos, que nos salvan de los duelos.

Nuestros alarifes, maestros, arquitectos, alquimistas, pintores y forjadores son:


JAVIER, ROCÍO, PALOMA HIDALGO, AURELIANO, ISABEL, JOSÉ LEÓN, DAVID, FEDERICO, CINTA, JOSE MARIA, LEO, ALMA, MARÍA JESÚS, ANA, AMELIA, MARIA.


Cinta Rosa Guil Redondo
14 de marzo de 2014

No hay comentarios: